jueves, 3 de febrero de 2011

Lo inesperado.

Yo sólo iba a hacer mi recado, no esperaba nada y mucho menos la intentaba buscar, pero, ¿Quien decide lo que le va a tocar a cada uno?. Obviamente cada uno elige su destino, pero es la propia vida quien te condiciona, de lo contrario no estaríamos vivos, simplemente seguiríamos un juego sin fallos, monótono y aburrido.

Me acercaba a mi lugar de encuentro donde, supuestamente me tenia que reunir con una mujer a la cual desconocía (y de hecho, desconozco) y darle una bolsa. Cuando llegué me encontré en un cara a cara con el porterillo, pues no me acodaba cual era su piso, así que llamé por llamar, mas acerté. Aquella mujer dijo que en vez de ella bajaría su propio hijo, a quien tampoco conocía.

 Aquella mujer dijo que yo abriese la puerta, algo que no entendí, pero no hizo falta ninguna reflexión pues pronto llegó su hijo. Ni mucho menos a lo que yo me esperaba, pues era un chico bastante chico, ¿Tres años podría tener? no lo sé, la verdad. Pero en aquel momento me llamó bastante la atención. Era tan chico que ni siquiera me llegaba a la cintura. Tampoco es que yo sea tan alto, tengo una estatura bastante acorde con la media; alrededor del 1,69 estoy. Me dio impresión ver algo tan chiquitito.

Venia corriendo y con una cara un tanto peculiar, como aquel que hace un problema matemático; no es de asombro, mas bien de interés. Tal y como vino cogió la bolsa que le di y volvió a irse sin decir una sola palabra. Al correr los pelitos le rebotaban, pues tenía un poquito de melena.

En esos momentos no sabia que pensar... Por un momento pude sentir y entender a Holden Caulfield, de El Guardián Entre el Centeno. en ese momento... "me imagino a muchos niños pequeños jugando en un gran campo de centeno y todo. Miles de niños y nadie allí para cuidarlos, nadie grande, eso es, excepto yo. Y yo estoy al borde de un profundo precipicio. Mi misión es agarrar a todo niño que vaya a caer en el precipicio. Quiero decir, si algún niño echa a correr y no mira por dónde va, tengo que hacerme presente y agarrarlo. Eso es lo que haría todo el día. Sería el encargado de agarrar a los niños en el centeno. Sé que es una locura; pero es lo único que verdaderamente me gustaría ser. Reconozco que es una locura.".

Pero por otra parte me asombra como evolucionamos... ¿como podemos crear algo así?. Mucha de las personas que existe actualmente y ha existido no sabe siquiera hacer una simple reflexión, un problema matemático o construir algo con sus manos. Sin embargo, todos somos capaces de dar vida a partir de, practicamente, la nada... algo tan maravilloso... y sin embargo no entendemos.

El problema de toda esta maravilla es que no somos conscientes de lo que hacemos. Sólo sabemos que es maravilloso y que somos capaces de hacer algo de tal envergadura, pero sin embargo no sabemos que hacer con ellos. El problema de nuestra sociedad radica desde el nacimiento del mismo; no sabemos como educarlos, pues nosotros tampoco fuimos educados.
Ese chavalín comienza una vida, una vida que debería de vivir al máximo y así poder satisfacer su 'eterno retorno'. Pero sé que ha nacido en un mundo que se lo impedirá... aun así, espero que todo le vaya bien.

Tu has sido como ese chico, pero... ¿Aun eres igual de libre?.

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