martes, 12 de julio de 2011

Terrorismo Audiovisual.

Una idea tan flamante como es la de un objeto capaz de transmitir audio y video dio un vuelco a la sociedad hace ya muchos años. El problema vino cuando comenzó la guerra y la televisión se convirtió en un mero medio para un nuevo terrorismo.

Hace poco me encontraba tranquilamente cenando. Uno de mis compañeros de piso estaba viendo la típica telenovela adolescente. Por lo visto era su ultimo capitulo. Hasta entonces todo iba -relativamente- bien. El problema fue cuando vi algo que me dio tanto asco que me hizo levantarme e irme al cuarto. Se trataba de los protagonistas haciendo una especie de Huelga con un descarado guiño al movimiento 15M. Era realmente patético.

Después de ver ese capítulo, más de un jovenzuelo se sentiría reivindicativo, pero es una idea inducida, y muy mal hecho, por cierto. La idea, además de pésima, no tenía fuerza alguna. Los enchaquetados que se dedicaban a hacer la serie se preocuparon mas en hacer que el decorado se pareciese lo máximo posible a "AcampadaSol" que en el guion o en la historia en si. Puede, también, que el no conocer la historia fuese un motivo de mi desorientación, pero sin embargo solo era un factor mínimo.


Ver que algo en lo que dejas tanto sudor de tanto trabajar queda reducido a cenizas por una serie te hace una presión en el pecho que te impide la respiración. ¿De verdad que todo lo que hacemos va a quedar estéticamente así por culpa de... ESO?.

Es repugnante tener que hablar de eso. Cada uno puede comprobar cómo era ese capítulo. Pero la TV en sí da para mucho que hablar. Y es que antes las cadenas se dedicaban al arte de la TV, ahora al arte de la manipulación.

Todas las cadenas están politizadas. Censuran, manipulan, inducen... da asco tener apartado en el rincón de la casa algo con lo que la humanidad pudiese sacar mucho provecho. Y es que hoy día si quieres ver algo bueno lo único que puedes hacer es descargarte una buena película y ponerla. Otro valor no tiene.

Es fácil detectar la mierda que venden. Todo depende si Gobierna el PSOE o el PP, además de quien de los dos sea el que le paga. No debemos de dejarnos llevar por lo que nos cuentan, de hecho no debemos ni escucharles. No dicen nada productivo.

Apaga la televisión, enciende tu ilusión.