viernes, 5 de abril de 2013

El peor enemigo

Es duro cuando reconoces que el enemigo no es solo aquella persona a la que tiene en el punto de mira, sino que también es tu compañero que te ayuda a disparar, y también es uno mismo. Y digo ‘reconoces’ porque realmente lo sabes, pero no lo quieres admitir.

Solemos pensar que las malas personas son esas que no piensan como nosotros. Aquellas personas con las que discrepamos en las conversaciones, aquel político de ideología contraria, aquella persona con cierto poder… cuando en realidad no es así. El peor enemigo también está en tus filas, y también eres tú mismo. Y es que en realidad enemigas no son las personas, sino las actitudes que nos invaden como el egoísmo o el odio. Cuando vemos egoísmo u odio en aquellas personas a las que siempre hemos considerado enemigas, solo acrecentamos nuestro odio hacia ellas, mientras que cuando lo vemos en notros mismos solo tendemos a justificarnos.

Nadie es realmente tu enemigo, no cierres tu mente. Tus verdaderos enemigos son el egoísmo, el odio, la insolidaridad, la falta de respeto… a ellos son a quienes debes de matar, sea de quienes sea. Cuando estos enanos te posean, recuerda que eres dueñ@ de tu cuerpo, un cuerpo gigante luchando contra enanos a los que nosotros mismo acrecentamos. Lo único que debemos de hacer es ignorarlos, y así morirán solos. Rodéate de amor. Amor que puedes encontrar en personas, campos, arboles, nubes, música… cuando debilites, ellos serán tu caballo de lucha, y juntos podréis combatir al verdadero enemigo.

Solo cuando seamos capaces de acabar con ellos, acabaremos con los verdaderos enemigos. No solo con aquellos a los que creíamos nuestros enemigos, sino también con esa parte que nos hacia enemigos de nosotros mismos y no lo queríamos ver.

No hay comentarios:

Publicar un comentario